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‘Kyōen’: un documental sobre Kasai Jun, el “mono loco” de la lucha libre

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Kasai Jun, luchador que se ha labrado una carrera casi exclusivamente a base de combates de deathmatch, es conocido entre los más famosos de la lucha libre como “el más loco”. El documental Kyōen nos lo muestra en pantalla a través de sus vicisitudes: perdiendo el deseo de luchar tras una lesión, regresando al cuadrilátero, sufriendo los efectos de la pandemia...

Kasai Jun KASAI Jun

Nacido en 1974 en Obihiro, Hokkaidō. Miembro del grupo de lucha libre profesional Freedoms. Entró en la promoción Big Japan Pro Wrestling en 1998. Debutó profesionalmente en el torneo Tsurumi Ryokuchi Hanahaku Kōen Hiroba el 23 de agosto del mismo año. Ha combatido en todo tipo de eventos con diversos grupos, y debido al carácter único de su personaje cómico sobre el ring ha sido apodado “el carisma del deathmatch”. En 2009 fundó, junto a Sasaki Takashi, el grupo Freedoms. En noviembre de ese mismo año realizó un combate contra Itō Ryūji que fue elegido el mejor del año en los Premios Pro Wrestling, algo bastante inusual para un combate de deathmatch.

Una infancia de la lucha libre

Muchas personas que vivieron su infancia durante la era Shōwa recordarán haber visto algún combate de lucha libre junto a su padre, quizá mientras este bebía cerveza. Sakai Jun, luchador libre nacido a finales de dicha era, en 1974, tiene ese tipo de recuerdos. Siendo estudiante de primer curso de primaria vio un día de invierno un combate de la Competición Nacional Japonesa de Lucha Libre, que se celebraba en su Obihiro natal, y quedó fascinado.

Kasai era un fanático de la lucha libre desde niño. ©2021 Jun Kasai Movie Project.
Kasai era un fanático de la lucha libre desde niño. ©2021 Jun Kasai Movie Project.

Tras graduarse en el instituto consiguió un trabajo en una empresa de seguridad de Tokio, pero no podía abandonar su sueño de convertirse en luchador, de modo que terminó por dejar ese trabajo, regresó a su ciudad y comenzó a entrenar. Al regresar a Tokio lo hizo llamando a la puerta grande, a través de la cual entró en los deathmatch, los “combates a muerte” del Dai Nihon Puroresu o Big Japan Pro Wrestling (BJW), el nivel más brutal de la lucha libre japonesa. Las palabras de su padre, cuando veían juntos la lucha por televisión, resonaban en la mente de Kasai: “Esa técnica no le hace nada”; “Esa patada no ha conectado”.

“No me gustaba escuchar esas cosas, cuando era niño. Si me convertía en luchador profesional, quería llegar a tal nivel que mi padre no pudiera decir lo mismo de mí. Así que decidí que lo único que podía hacer era participar en el deathmatch, un tipo de evento en el que el público, sea quien sea, puede comprender que hay verdadero dolor”.

Aunque había entrenado con pesas, era relativamente bajo para hacer lucha libre: 173,5 centímetros de altura, y bastante mayor (23 años) para ser principiante. Al principio nadie daba mucho por él. Sin embargo, poco a poco se fue ganando el corazón del público con su actitud de “hago lo que sea” y se labró una fuerte presencia en la lucha libre.

150 agujas en la espalda y las lágrimas de una madre

Con el tiempo comenzó a participar también en combates como miembro del grupo estadounidense CZW (Combat Zone Wrestling), que visitó Japón para competir en el BJW, y se fue estableciendo con su personaje Crazy Monkey (“mono loco”), que arrasó con su histriónica vena cómica. En 2001 CZW invitó a Kasai a viajar a Estados Unidos, su primera experiencia en el extranjero.

“Los aficionados estadounidenses están a un nivel diferente de los japoneses. Resulta asombroso ese entusiasmo que tienen por disfrutar por cada centavo de entrada que han pagado. Cuando los veía me daban aún más ganas de luchar”.

Kyōen, un documental de Kawaguchi Jun. ©2021 Jun Kasai Movie Project.
Kyōen, un documental de Kawaguchi Jun. ©2021 Jun Kasai Movie Project.

Esa primera vez en Estados Unidos el fervor del público lo dejó absorto; en esa ocasión sufrió una laceración de 150 agujas en la espalda. Cuando regresó a Japón lo enviaron a Hokkaidō, donde tuvo que participar en el torneo de otro grupo en Sapporo, y se vio obligado también a visitar su Obihiro natal por labores comerciales para la siguiente competición; cuando apareció en su casa y su madre lo vio, cubierto de heridas, se echó a llorar.

Aun así no sintió deseos de abandonar. En un combate tras otro siguió sufriendo heridas de alambre de espino, de chinchetas arrojadas sobre el suelo del ring, de fluorescentes reventados sobre el cráneo, de cortes con hojas de afeitar, de saltos desde varios metros de altura.

“Un luchador arriesga su cuerpo y su vida misma en el combate, pero si te lesionas de verdad o te mueres, no eres un profesional. Por mucho que se nos vea ensangrentados y enloquecidos, en algún lugar de nuestro interior hay serenidad y sangre fría”.

Y sin embargo en el deathmatch los luchadores se lesionan, por supuesto. No es que Kasai nunca pensara en retirarse, con tal cantidad de heridas y combates perdidos. En ocasiones tuvo que retirarse temporalmente debido a alguna lesión grave, como una rotura de ligamentos en la rodilla o una enfermedad de algún órgano, pero en cada ocasión sentía crecer su pasión por el combate, y regresaba al ring.

El primer combate de Kasai, en el Kōrakuen Hall (28 de julio de 2020) desde que comenzara la pandemia. Su rival era una nueva estrella, Sakuda Toshiyuki. ©2021 Jun Kasai Movie Project.
El primer combate de Kasai, en el Kōrakuen Hall (28 de julio de 2020) desde que comenzara la pandemia. Su rival era una nueva estrella, Sakuda Toshiyuki. ©2021 Jun Kasai Movie Project.

“Yo no empecé en la lucha libre porque desde el principio me gustara el deathmatch. Más bien mi amor por esta modalidad fue creciendo a medida que los aficionados me iban diciendo lo impresionante que les parecía mi estilo. Hay otros luchadores que me superan, en términos de técnicas de lucha libre y capacidades físicas, pero no creo que nadie me supere en pasión por el deathmatch”.

Convalecencia… y el coronavirus

Sin embargo en 2019, veintiún años después de debutar como luchador, llegó el mayor desafío de su carrera. Los médicos encontraron hernias en el cuello y la cadera de Kasai, zonas de su cuerpo sometidas a años de duros abusos, y se vio obligado a someterse a un tratamiento a largo plazo.

Kasai en el momento de hacerse una resonancia magnética. ©2021 Jun Kasai Movie Project.
Kasai en el momento de hacerse una resonancia magnética. ©2021 Jun Kasai Movie Project.

“No sentía ningún deseo de realizar combates. Aquello era muy diferente de las heridas y problemas internos que había sufrido hasta entonces. En aquel momento ni siquiera podía subirme al cuadrilátero por mí mismo, pero esta vez si me esforzaba un poco podía luchar en un combate; eso me ponía las cosas más difíciles. No sabía cuándo volvería el dolor, y me aterraba pensar que podía quedar inmovilizado sobre el ring”.

Aun así continuó luchando hasta finales de año. El documental Kyōen (El mono loco), que sigue la vida y la carrera de Kasai Jun, abre su narrativa con su último combate antes de suspender sus actividades, celebrado en el cuadrilátero de la sala Kōrakuen Hall (Tokio), en las Navidades de ese año. Sakai recuerda, con el rostro natural de alguien que sabe cuidar de su hija, su vida en el mundo de la lucha libre profesional. También hay algo de desaliento en su expresión, probablemente por no poder trabajar ya como cabeza de familia.

Durante su recuperación Kasai podía jugar con su hija en el parque. ©2021 Jun Kasai Movie Project.
Durante su recuperación Kasai podía jugar con su hija en el parque. ©2021 Jun Kasai Movie Project.

Tras una temporada de descanso Kasai comenzó a recuperarse, y su médico especialista, después de realizarle una resonancia magnética, dijo para alivio del luchador que aún podía trabajar sobre el ring. No obstante, no resultaba tan fácil recuperar la energía necesaria para hacerlo. Por invitación de Nick Cage, antiguo miembro de CZW, Kasai decidió que el escenario de su regreso debía ser Estados Unidos, y se obligó a encontrar en ello inspiración para luchar.

“Los luchadores profesionales, si no pertenecemos a alguna organización grande, no tenemos ingresos a no ser que participemos en combates. Yo tengo esposa y una hija. No tenía mucha motivación, pero mi cuello y mi cadera habían mejorado bastante, y tampoco podía quedarme para siempre encerrado en casa; la idea de regresar al cuadrilátero en Estados Unidos me iba pareciendo cada vez mejor”.

No obstante, ese plan se vio frustrado por la pandemia del coronavirus.

“Cuando me veo a mí mismo en el documental, en ese momento, me doy cuenta de que estaba totalmente desesperado (risas). El reto de volver al ring en Estados Unidos se fue al traste, y ya no sabía cuándo podría volver a luchar, así que empecé a beber de buena mañana, y a llevar una vida decadente empapada en alcohol”.

Sin motivación para volver al ring. ©2021 Jun Kasai Movie Project.
Sin motivación para volver al ring. ©2021 Jun Kasai Movie Project.

Deathmatch: una forma de vida

En cierto momento Kasai llegó a decir que había dado todo lo que podía dar, pero la pandemia hizo que los combates de lucha libre se fueran cancelando uno tras otro; finalmente el luchador optó por realizar su regreso en el escenario de uno de los eventos que la organización a la que pertenecía había decidido realizar como fuera.

Así fue como el 10 de junio de 2020, el grupo Freedoms al que Kasai pertenecía reanudó sus actividades tras tomar cuidadosas medidas para evitar y controlar todo posible contagio. Sin embargo la escena de ese combate, recogida en el documental, resulta muy extraña. El público, ansioso por vitorear a su héroe, debe conformarse con aplaudir y hacer gestos.

©2021 Jun Kasai Movie Project.
©2021 Jun Kasai Movie Project.

“Resultó bastante chocante. Hasta ese momento luchar en un combate había significado escuchar los gritos de apoyo, oír mi nombre cuando me encontraba en un apuro; luchar sin ninguno de esos sonidos... Quería que a alguna persona, al menos, se le escapara un grito. El público había venido a ver la lucha libre para olvidar durante un rato la realidad del coronavirus, pero yo no fui capaz de crear un espacio de entusiasmo tan fuerte como para arrancarles una voz, y me sentí decepcionado conmigo mismo. Se trata de un proceso continuo; todavía estoy buscando”.

Aunque el combate de regreso resultó una experiencia difícil, Kasai murmura su agradecimiento por poder plantarse de nuevo ante el público. ¿Por qué regresó al cuadrilátero tras haber asegurado, en medio de la confusión en la que se hallaba el mundo y él mismo, que había dado todo lo que podía dar?

“Al final es porque me gusta, claro. No sé cómo explicarlo... bueno, no puedo decirlo de otro modo, honestamente. Después de dejar el deathmatch no podía encontrar ninguna otra cosa en la que quisiera trabajar. Tras veintitrés años en el ring me siento orgulloso y feliz de poder hacer lo que más me gusta y alimentar así a mi familia”.

Después del combate, ¿qué haces con los cristales del fluorescente que siguen clavados? “Me ducho y ya está”. ©2021 Jun Kasai Movie Project.
Después del combate, ¿qué haces con los cristales del fluorescente que siguen clavados? “Me ducho y ya está”. ©2021 Jun Kasai Movie Project.

La cámara de Kyōen sigue a Kasai por todas partes, y hace pensar al público, a aquellos que están ya exhaustos y tratan de levantarse de nuevo, que pueden descansar un poco más. En la segunda mitad de la película Kasai, tras regresar a la lucha, comienza de nuevo a brillar. Se puede ver claramente la llama de la vida que arde en el fondo de sus ojos, a través de la pantalla.

“Lucho para vivir. Subo al ring, sangro, siento dolor. Y al hacerlo me siento realmente vivo. Si llevara una vida normal no podría lograr ese sentimiento que sí puedo conseguir en el deathmatch. ¿No es esa su verdadera atracción? Cuando vuelvo a casa, después de un combate, doy gracias por haber podido regresar sano y salvo. Por eso no puedo dejarlo. Tengo que trabajar duro para seguir moviéndome sin sentir el paso de los años, incluso cuando sea un abuelo”.

Imágenes de la entrevista: Igarashi Kazuharu
Texto: Matsumoto Takuya

(Artículo traducido al español del original en japonés)

©2021 Jun Kasai Movie Project.
©2021 Jun Kasai Movie Project.

Información de la película

  • Elenco: Kasai Jun, Sasaki Takashi, Fujita Minoru, Honma Tomoaki, Itō Ryūji, Danny Havoc, Takeda Masashi, Sugiura Tōru, Sakuda Toshiyuki, Tokasa Eiji, Matsunaga Mitsuhiro y otros
  • Dirección: Kawaguchi Jun
  • Coproducción: Island Films
  • Producción: Proyecto de Producción de la Película de Kasai Jun (Space Shower Network + Pony Canyon + Pro Wrestling Freedoms)
  • Distribución: Space Shower Films
  • Año de producción: 2021
  • País: Japón
  • Duración: 107 minutos
  • Página web oficial (en japonés): https://kyoen-movie.com/

Tráiler

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