A pesar de su popularidad, cada año se registran menos perros de raza akita en Japón
Sociedad Naturaleza- English
- 日本語
- 简体字
- 繁體字
- Français
- Español
- العربية
- Русский
La raza canina akita es originaria de la prefectura homónima del norte de Japón. Sus raíces se remontan a la década de 1630, en los albores del periodo Edo (1603-1868), con el cruce de perros que se usaban para la caza matagi (caza de osos que existía desde tiempos antiguos en el norte de Tōhoku) y otras razas autóctonas. Estos perros tienen una altura promedio de 60 cm y pesan entre 30 kg y 59 kg, por lo que son clasificados como una raza de perros grandes.
La Sociedad Protectora de los Perros Akita (con sede en la ciudad de Ōdate, en la prefectura de Akita) fue fundada en 1927 con el objetivo de proteger el pedigrí de esta raza que, a partir del periodo Meiji (1868-1912), se había comenzado a mezclar con otras. También establecieron oficinas en todas las prefecturas de Japón y clubes en 11 países entre los que se encuentran Estados Unidos, Francia, Rusia, China y Taiwán. En estas sucursales se expiden certificados de pedigrí, además de organizar exposiciones, entre otras actividades de promoción de la raza akita. También llevan registros anuales de todos los nuevos ejemplares que se registran dentro y fuera de Japón.
Según esta sociedad, el número de perros akita se redujo de forma notable durante la Guerra del Pacífico debido a la orden de captura que emitió el Ejército. Al final del conflicto se cree que solo habían sobrevivido unas cuantas decenas de ejemplares, lo que provocó que esta raza estuviera en peligro de extinción. Posteriormente, con el apoyo de los amantes de los perros, se logró que más ejemplares se reprodujesen y para 1972 su número aumentó hasta los 46.225. Sin embargo, ese mismo año se registró un máximo histórico que se redujo en adelante la cifra de 2.038 en todo el mundo en 2011. Algunos de los factores que han ocasionado esta disminución son la mayor demanda de perros de raza pequeña por la transformación del entorno de las viviendas, así como el envejecimiento y la falta de herederos entre los criadores.
Gracias al éxito de la película Siempre a tu lado, Hachikō (HACHI, yakusoku no inu) protagonizada por Richard Gere y estrenada en 2009, entre otros factores, la raza akita se popularizó fuera de Japón y para 2017 la cifra se había recuperado hasta alcanzar los 6.671 ejemplares. Sin embargo, la disminución dentro de Japón no se detuvo y en 2023 se registró la cifra más baja con 1.832 ejemplares, incluso por debajo de los 1.964 de 2011.
El fiel Hachikō es un ejemplo perfecto de cómo los perros de la raza akita son muy leales a sus dueños y no se acostumbran fácilmente a otras personas, por lo que son conocidos como “perros de un solo dueño”. No son pocos los perros que, tras ser abandonados o llevados a centros de sanidad, acaban siendo sacrificados.
Con el objetivo de aumentar el número de perros akita en Japón y conseguir que no se sacrifique a ninguno, en 2018 se estableció la fundación ONE FOR AKITA (con sede en la ciudad de Akita). Para conseguir recursos con el fin de que los perros abandonados puedan ser adoptados o cuidados en instalaciones hasta el fin de sus días, se lleva a cabo una campaña de micromecenazgo en el sitio general de recaudación de impuestos locales Furusato Choice (disponible hasta el 23 de octubre en el caso del año fiscal 2024).
Para más información, se pued visitar el sitio web de ONE FOR AKITA Project (en japonés): http://www.saveakita.or.jp/ofa/
Imagen del encabezado: perros de raza akita caminando con sus dueños por las calles de Shibuya, Tokio, en un evento por el 100 aniversario del nacimiento de Hachikō en diciembre de 2023. (Kazuki Oishi/Sipa USA via Reuters Connect)