Un 33,5 % de los japoneses de entre 70 y 74 años continúa trabajando

Un informe del Ministerio de Asuntos Internos y Comunicaciones revela que en 2022 había unos 9,12 millones de trabajadores mayores de 65 años. Se trata del decimonoveno año consecutivo que esta cifra aumenta. La proporción de trabajadores de edad avanzada respecto al número total de trabajadores es del 13,6 %, lo que significa que uno de cada siete trabajadores tiene 65 años o más.

La tasa de empleo de los mayores de 65 años aumentó en 0,1 puntos porcentuales respecto al año anterior, situándose en el 25,2 %. Por grupos de edad, el 50,8 % de las personas de 65 a 69 años y el 33,5 % de las de 70 a 74 años continuaron trabajando, unos porcentajes máximos históricos; el 11,0 % de las personas de 75 años o más también estaban empleadas.

Entre los trabajadores mayores, 5,29 millones eran “empleados”, excluidos los autónomos y los directores de empresa. El 76,4 % de ellos ejercían un empleo irregular, en particular los empleos a tiempo parcial y temporales, que representaron más de la mitad del total. Solo el 23,6 % conservaba un empleo regular.

Mientras que la población disminuye debido al rápido avance de la baja natalidad y el envejecimiento demográfico, es cada vez más difícil mantener el sistema convencional en el que las generaciones laborales sostienen el creciente número de personas de edad avanzada.

La Ley revisada de Estabilización del Empleo entre las Personas Mayores, que entró en vigor en abril de 2021, exhorta a las empresas a que se esfuercen por retrasar la edad de jubilación a los 70 años y que introduzcan un sistema de empleo continuo, incluido el reempleo. Sin embargo, parece que cada día está más cerca la posibilidad de que trabajemos superados los 70 años.

Fotografía del encabezado: PIXTA.