Décimo aniversario de la Tokyo Skytree: continúa la urbanización alrededor la torre
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La Tokyo Skytree (Oshiage, distrito de Sumida), de 634 metros de altura, fue inaugurada el 22 de mayo de 2012. Esta torre, la más alta del mundo, celebra su décimo aniversario. A pesar de que el número de turistas se redujo de forma sensible como consecuencia de la pandemia del coronavirus, a finales de 2021 la torre había recibido un total de 40 millones de visitas. El conjunto, la Tokyo Skytree Town, compuesta por el centro comercial Tokyo Solamachi y las oficinas Tokyo Sky Tree East Tower, ha albergado en total más de 300 millones de visitantes.
La torre ya es reconocida como uno de los símbolos más representativos de Tokio. A pesar de que su construcción terminó hace años, el proceso de urbanización de la zona aledaña a la torre continúa avanzando, tal como lo declaró Yamamoto Hideki, ejecutivo de Nikken Sekkei, empresa a cargo del diseño de la Skytree, durante un seminario para la prensa que se celebró por el décimo aniversario de su inauguración.
La torre aleja la imagen gris de la zona
Aprovechando la digitalización de la televisión terrestre, la emisora pública NHK y las principales emisoras privadas solicitaron la construcción de una torre de transmisiones de unos 600 metros de altura. En diciembre de 2003 se inauguró el Proyecto de seis empresas con sede en Tokio para el desarrollo de una nueva torre. El distrito de Sumida, zona que buscaba atraer la construcción, y otras personalidades del lugar solicitaron el apoyo de la empresa ferroviaria Tōbu. En marzo de 2006 se decidió que los terrenos que pertenecieron a una antigua estación de carga entre las estaciones de Oshiage y Narihira-bashi (ahora estación de Tōkyō Skytree) se ocuparían para la construcción de la torre.
Según Yamamoto, el exalcalde Yamazaki Noboru, quien encabezó los trabajos para atraer la construcción, expresó su deseo de que la torre tuviera un color claro ya que quería acabar con la imagen gris de esta zona, ocupada principalmente por fábricas pequeñas y medianas. Esas palabras se quedaron grabadas en su mente.
Tras la Segunda Guerra Mundial, el distrito de Sumida renació como una zona industrial repleta de fábricas pequeñas y medianas. Estas sostuvieron el periodo de rápido crecimiento económico de Japón y fueron un elemento primordial en el surgimiento de la cultura de las clases populares shitamachi de Tokio. No obstante, para el año 2008, cuando comenzó la construcción de la Tokyo Skytree, solo sobrevivía aproximadamente un tercio de las cerca de 10.000 fábricas que existían a principios de la década de 1970. El exalcalde Yamazaki pensó que el alborozo de los turistas podría ayudar a mejorar la imagen del distrito y devolver la vitalidad a las empresas manufactureras de la zona.
Para las partes involucradas en la construcción de la nueva torre, también representaba una tarea pendiente la continuidad de las operaciones. Al revisar ejemplos de proyectos parecidos dentro y fuera de Japón, se comprobó que el número de visitantes disminuía paulatinamente después del revuelo de la inauguración. Con el fin de sortear esta tendencia era necesario que la zona aledaña a la torre fuera atractiva para lograr que la vitalidad no desapareciera. Ya que ambas partes compartían la misma postura, se convirtió en un ambicioso proyecto conjunto entre los sectores público y privado que no se reducía a la construcción de una torre, sino en un plan para hacer de todo el distrito de Sumida una zona turística.
El distrito definió este plan como “el lugar de origen de la cultura popular shitamachi construye una nueva historia” y se propuso convertirse en una parada de circulación entre zonas como las de Asakusa, en el distrito de Taitō, y Kameido, en Kōtō, puntos turísticos de gran popularidad que también comparten la cultura shitamachi.
Una zona que continúa urbanizándose incluso después de la inauguración de la torre
Para coincidir con la inauguración de la Tokyo Skytree Town se mejoraron las instalaciones de purificación de agua del río Kitajukken y se construyó un espacio en la ribera del río con un sendero peatonal y un atracadero para embarcaciones turísticas.
Posteriormente, comenzaron los trabajos para mejorar el paisaje a través de la instalación de cableado eléctrico subterráneo. En el año 2016 se inauguró el Museo de Arte Sumida Hokusai (Kamezawa, distrito de Sumida), cerca de la estación de Ryōgoku, que también era parte del plan. En junio de 2020 se inauguraron el centro comercial Tokyo Mizumachi, en la zona bajo las vías de la línea ferroviaria Tōbu Isesaki (Tōbu Skytree Line) y el sendero Sumida River Walk, al lado del puente que cruza el río Sumida. Esto hizo más atractiva la ruta de paseo que conecta con Asakusa.
En la actualidad, para evitar las congestiones vehiculares y accidentes, se están llevando a cabo obras para elevar las líneas ferroviarias y quitar los pasos a nivel cercanos a la estación Tōkyō Sky Tree. También se prevé colaborar con la zona de Mukōjima Hanamachi, lugar donde trabaja el mayor número de geishas en Tokio.
La población y los servicios que ofrece la zona continúan aumentando
El distrito señaló a Nikken Sekkei que tras la inauguración de la torre en el distrito de Sumida, ha aumentado de manera indiscutible el número de visitantes que llegan desde Asakusa, así como los nuevos establecimientos en las calles que conectan estas zonas y otros lugares cercanos.
Los habitantes que llevan mucho tiempo en Sumida también han recibido con beneplácito que su distrito sea más conocido. En la sección del pronóstico del tiempo de la televisión aparece casi a diario el paisaje con la torre de fondo y un letrero con la ubicación: “distrito de Sumida, Tokio”, por lo que se ha convertido en un lugar conocido a nivel nacional.
Como resultado, la oferta de apartamentos, el precio de los terrenos y los alquileres han aumentado. A pesar de que existe una tendencia de reducción de la población dentro de los 23 distritos de Tokio, en Sumida, incluso durante la pandemia, el número de residentes ha seguido aumentando. Además, no son pocas las personas con alto poder adquisitivo que han elegido este distrito como su nuevo hogar. Gracias a una mayor recaudación fiscal, el distrito cuenta con más recursos que le permiten ofrecer mejores servicios y crear un entorno más favorable.
Fotografías: equipo editorial de nippon.com.
(Traducido al español del original en japonés. Fotografía del encabezado: la vista del parque Ōyokogawa y la torre Tokyo Skytree desde el puente Hōonji en la avenida Kuramaebashi.)