• Paseando por Asakusa como si fuéramos de Edo

    El barrio tokiota de Asakusa floreció en torno al templo budista Sensōji, lugar de culto para las clases populares. En el período Edo (1603-1867), prosperó como zona comercial: albergaba numerosos restaurantes donde agasajar a clientes y otras visitas, además de tiendas de mayoristas que se dedicaban a la venta de artesanía. Hoy las convenciones sociales y el sentimiento propios de las clases populares en la época en la que Tokio todavía se llamaba Edo perviven en Asakusa. En aquel entonces, este barrio era también una de las zonas más elegantes de la ciudad, un lugar moderno que marcaba tendencias en la gastronomía y las compras. Viajemos en el tiempo y trasladémonos hasta el Asakusa que más les gustaba a los habitantes de Edo.