Claire, una perrita que enseña sobre la dignidad de la vida en una escuela primaria
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Un colegio con perros desde 2003
“¡Hala! ¡Qué bonita es!”. Así reacciona un grupo de estudiantes de primero cuando el profesor Yoshida Tarō entra en el aula acompañado de Claire.
“Bajad la voz. Si una persona a la que no habéis visto nunca se pone a gritaros, os asustáis, ¿verdad? A los perros les pasa lo mismo”, explica el maestro.
Después de dar una vuelta por el aula con el profesor Yoshida, Claire se tumba en el suelo a descansar.
Claire, una perra guía procedente de la Asociación EyeMate, “trabaja” en la Escuela Primaria St. Margaret’s. Este centro educativo lleva teniendo perros desde 2003. La iniciativa surgió a raíz de las palabras de una estudiante que no acababa de acostumbrarse al colegio y que un día dijo que podría divertirse allí si hubiera un perro. Entonces el profesor Yoshida empezó a mover los hilos para implantar un modelo educativo que incluyera animales y que sirviera para desarrollar el aspecto afectivo de las alumnas.
“Nos llevó tiempo escoger la raza de perro ideal para la escuela. Al principio pensamos en un caniche toy, que es pequeño y suelta poco pelo. Sin embargo, nos pareció que sería mejor una raza con una capacidad de respuesta mayor, dado que las estudiantes de primaria tienen mucha energía. Al final nos decantamos por una terrier Airedale, la de mayor tamaño de todos los terrier”, cuenta el maestro.
Una despedida triste y el origen de una nueva vida
La primera perra que tuvo la escuela se llamaba Buddy y parió dos camadas, algo que sirvió para que las estudiantes aprendieran sobre el origen de la vida.
“Buddy murió a los 12 años. Posteriormente, el colegio tuvo dos perras más, Link, una hija de esta, y Will, un can procedente de un refugio que se encargaba de los animales afectados por el accidente nuclear de 2011. Cuando ambas mascotas fallecieron, se celebraron sendas ceremonias de despedida en la capilla de la escuela. Las estudiantes guardan un vivo recuerdo de estos acontecimientos”, afirma Yoshida.
A día de hoy la escuela recibe a diario a dos perritas: Claire y Verona, la sobrina de Buddy. La primera de ellas parió su cuarta camada en la primavera de 2021.
“Con la llegada de Buddy, en seis años las alumnas han visto el nacimiento de una camada como mínimo. Ser testigos del origen de la vida también les permite darse cuenta de manera natural de la felicidad que conllevó su propio nacimiento”, señala el profesor.
A las estudiantes les muestran los cachorros a los tres días de nacer y van observando su crecimiento a diario.
“Las alumnas ven que la madre lame a los cachorros para limpiarles el pis y la caca; esta imagen les parece algo sucio. Sin embargo, cuando les preguntamos si creen que sus padres reaccionaban de la misma forma cuando les cambiaban los pañales, su respuesta es tajante: ‘Claro que no’. Esta reacción, así como la cara de felicidad de las estudiantes cuando responden, es la misma tanto entre las alumnas de primero como entre las de sexto”, prosigue Yoshida.
Cuando visitamos St. Margaret’s, comprobamos que las estudiantes de primer curso, que acababan de ver a Claire por primera vez, se llevarían otra sorpresa: podrían pasar tiempo con sus nueve cachorros.
Claire daba vueltas con aire preocupado entre las alumnas, que abrazaban a los cachorros con cierto temor. Sin embargo, la perrita no ladró ni se enfadó en ningún momento. Posiblemente pensara que podía confiar en sus compañeras de colegio.
Perfil
Nombre: Claire.
Edad: 5 años, hembra.
Ocupación principal: ir todos los días al colegio, estar presente en las clases y otras actividades y jugar con las estudiantes en el recreo.
Lugar de trabajo: Escuela Primaria St. Margaret’s, Tōkyō-to Suginami-ku Kugayama 4-29-60.
Imagen del encabezado: Claire junto a un grupo de estudiantes de primero en la Escuela Primaria St. Margaret’s.
(Traducción al español del original en japonés.)