Grandes figuras de la historia de Japón
Yosa Buson: Un espíritu lúdico que aunó pintura y poesía
Literatura Cultura- English
- 日本語
- 简体字
- 繁體字
- Français
- Español
- العربية
- Русский
Un haikai libre de ataduras
Buson nació en 1716 en la aldea de Kema, actualmente comprendida en la ciudad de Osaka. Su apellido de nacimiento era Tani, que luego cambió por Yosa. Su padre era el muraosa, algo así como el alcalde, de la aldea. Para explicar su nuevo apellido, se ha propuesto que su madre fuese oriunda de Yosa, en la provincia de Tango, pero sobre la familia es muy poco lo que se sabe a ciencia cierta.
Tendría unos 20 años cuando se fue a Edo (actual Tokio), donde fue aceptado en la escuela de Yahantei Hajin. Alojado en su casa de Koku-chō, en el área de Nihonbashi, aprendió de él el haikai, publicando sus primeros poemas bajo el pseudónimo de Saichō. Hajin había sido discípulo de poetas como Kikaku o Ransetsu, de la escuela de Bashō, y cultivaba un estilo que primaba la libertad y la naturalidad. Según cuenta en el prólogo de su colección Mukashi wo ima, Hajin le recordó que en el mundo del haikai los discípulos no tenían por qué seguir el estilo de sus maestros. Esto concienció a Buson de que en el mundo del haikai uno es totalmente libre y no está atado a nada. Así pues, Buson extrae su idea de que las escuelas no deben constreñir la libertad de poeta del pensamiento de Hajin.
Al morir Hajin en 1742, Buson se trasladó a Yūki (actual prefectura de Ibaraki), donde Gantō, uno de los discípulos de Hajin más veteranos, lo acogió en su casa. Buson fue ganando experiencia como poeta y pintor durante sus errancias por la actual zona de Kita Kantō, prodigando también las excursiones hacia la norteña región de Tōhoku. Con el apoyo de Gantō y su grupo, en 1744 reunió sus poemas en el libro Utsunomiya saitanchō (“Poemas de año nuevo en Utsunomiya”), firmándolos por primera vez con el pseudónimo que lo haría famoso. Hay cierto consenso en decir que la inspiración para el nombre Buson, que significa “aldea desolada”, la obtuvo de la colección Guiqulaici (japonés: Kikyorai no ji) del poeta chino Tao Yuanming (jap.: Tō Enmei).
En 1754, con ocasión de la muerte de su amigo Hayami Shinga, decano del grupo poético de Yūki, compuso el poema Hokuju Rōsen wo itamu (“Elegía a Hokuju Rōsen”; Hokuju Rōsen era el pseudónimo de Hayami). Pertenece a un estilo llamado haishi, que no es ni un hokku (estrofa de arranque) ni un renku (poemas encadenados), inaugurado por Shikō, discípulo de Bashō, y cultivado por muchos poetas de Edo en años posteriores. Pero la perfección de los haishi de Buson no admite comparación y da la medida de tu gran talento poético. Veamos ahora los primeros versos de la elegía a Hokuju Rōsen.
君あしたに去(さり)ぬ ゆふべのこゝろ千々に/何ぞはるかなる/君をおもふて岡のべに行(ゆき)つ遊ぶ/をかのべ何ぞかくかなしき
Kimi ashita ni sarinu / yūbe no kokoro chiji ni / nan zo haruka naru / Kimi wo omoute oka no be ni yukitsu asobu / oka no be nan zo kaku kanashiki.
(Te has ido tú de mañana / mi corazón anochece hecho trizas / ¿por qué así te has alejado? / con tu recuerdo salí a las colinas / y las colinas ¿por qué están tan tristes?)
Labrándose una reputación como pintor
En 1751, a los 36 años, Buson se mudó a Kioto. En su biografía no hay indicios de que estudiara pintura bajo la dirección de un pintor profesional, por lo que debemos pensar que fue autodidacta. Tras su traslado a Kioto, recorrió los templos y santuarios de la ciudad para contemplar sus pinturas, e hizo viajes a varias provincias, entre ellas Tango y Sanuki, para curtirse como pintor.
La llegada a Japón de Shen Quan y de otros pintores chinos, así como la publicación de los manuales ilustrados de pintura llamados edehon y otros materiales favorecieron en la pintura japonesa del siglo XVIII el nacimiento de un nuevo estilo influido por la corriente china Nanzonghua (japonés: Nanshūga). Es el estilo llamado en japonés nanga. También Buson se entusiasmó con esos manuales y, poco a poco, se hizo un nombre como pintor nanga. En 1771 fue coautor de la colección de ilustraciones Jūben jūgi-zu (tesoro nacional) junto a Ike no Taiga, que se convertiría en su gran rival. La colección ilustra los poemas que el literato chino Li Yu, también conocido como Li Liweng, escribió sobre los placeres de la vida bucólica y las bellezas de la naturaleza. Ike no Taiga se encargó de la sección dedicada a las “10 cosas útiles” y Buson de la dedicada a las “10 cosas buenas”. Las de Buson constan entre las más destacadas de sus creaciones pictóricas.
Aquel periodo marcó su cenit como pintor, con obras como Fugaku resshō-zu (“El monte Fuji tras los pinos”, bien cultural de relevancia). Especialmente desde 1778, cuando comenzó a usar el pseudónimo Shain, pintó varias obras maestras, entre las que destacan Yashoku rōdai-zu (“Paisaje de torres en la noche”, ídem) y Chikukei hōin-zu (“Visita al eremita en la garganta de los bambús”, ídem).
La fusión pintura-haikai
Paralelamente, su actividad poética en Kioto se incrementó. En junio de 1766 fundó la sociedad de poetas de haikai Sankasha, que convocaba reuniones periódicas en las que se presentaban poemas sobre un tema prefijado. En un ambiente libre y distendido, los asistentes cotejaban los poemas debatiendo sus méritos. Las actividades de la sociedad se interrumpieron durante el periodo en que Buson viajó por la provincia de Sanuki, pero se reanudaron tras su regreso a Kioto. Fue allí donde Buson perfeccionó su técnica poética y produjo versos tan espléndidos como los que dicen:
鳥羽殿(どばどの)へ五六騎いそぐ野分哉(かな)
(Hacia el palacio de Toba
corren cinco o seis jinetes;
el viento peina los campos.)
En 1770 heredó de Hajin el nombre Yahantei y se estableció oficialmente en Kioto como haikai sōshō o maestro del haikai. Tenía 55 años, una edad muy avanzada para comenzar esa tarea. Cabe pensar que ese “retraso” sea consecuencia de haber priorizado la pintura.
Entre su pintura y su poesía se había establecido una estrecha relación. En el haiga, un género “transversal” que combina hokku con sencillos dibujos a manera de esbozos, Buson estaba como pez en el agua. Dejó muchas creaciones de gran mérito, en las que lirismo y humor cruzan resonancias. Especialmente exitoso fue su tratamiento del libro de Matsuo Bashō Oku no hosomichi (Sendas de Oku, en la traducción al español de Octavio Paz y Eikichi Hayashiya), que reprodujo íntegramente añadiéndole figuras humanas delineadas con sencillez y agilidad. Su trabajo fue altamente valorado y la demanda de sus reproducciones en emaki (rollos ilustrados), biombos y otros soportes fue muy grande.
Su forma de entender la pintura influyó mucho sobre su visión del haikai. En su ensayo Rizokuron, de 1777, expone estos dos puntos:
–El poeta no debe afrontar la poesía sin antes haberse desembarazado de todas sus ambiciones mundanas.
–Aunque en el haikai hay diversidad de escuelas y estilos, el poeta debe estar en posesión de todas ellas y elegir el haikai que juzgue más apropiado a cada momento y ocasión.
Estas ideas son, con las lógicas modificaciones, una adaptación a la poesía de postulados presentes en el clásico chino sobre pintura Jieziyuan huazhuan. En la época en que Buson estuvo activo, la clase intelectual huía de las ambiciones mundanas estudiando los clásicos chinos y japoneses y refugiándose en la pintura, la caligrafía, la música y otras artes. En sus principios Buson sostiene que también el haikai exige haber alcanzado ese tipo de riqueza espiritual.
Ludismo de honras raíces clásicas
Desde que adoptó el nombre de Yahantei, Buson y sus discípulos publicaron sucesivamente tres colecciones de poemas muy amplias: Sono yukikage (“Brillo de la nieve”, 1772), Akegarasu (“Cuervo del alba”, 1773) y Zoku-Akegarasu (“Continuación de Cuervo del Alba”, 1776). El parnaso japonés de la segunda mitad del siglo XVIII estuvo marcado por una gran variedad de escuelas y estilos. Todos pugnaban por abrir nuevos horizontes al haikai tras la muerte de Bashō, y Buson y sus discípulos no querían ser menos. Pero se cree que, en lo que respecta a estas colecciones, Buson se limitó a ejercer de guía, responsabilizándose de la edición su discípulo Kitō.
Las colecciones en las que Buson participó personalmente fueron siempre ediciones pequeñas que compartió solo con sus amigos y discípulos más cercanos. En estas ediciones, cada una de las cuales sigue un esquema y un estilo peculiares, dejó su sello personal. Por ejemplo, en An´ei kōgo saitan (“Poemas de año nuevo”, de 1774) Buson ilustró los poemas de sus discípulos, pero sin ceñirse demasiado escrupulosamente a los temas tratados. Al poema de Taisei que dice cómo, durante un paseo para disfrutar del nuevo año, un faisán lanzó su estridente graznido a sus espaldas en el momento en que se disponía a quebrar una rama de ciruelo, Buson le puso una ilustración de la famosa escena de la obra Rashōmon (teatro nō) en la que un ogro o demonio ataca a Watanabe no Tsuna por la espalda agarrándolo por el casco. Watanabe no Tsuna fue un guerrero de los siglos X-XI del que se decía que había puesto en fuga al demonio de Rashōmon, una de las monumentales puertas de Kioto. La ilustración no guarda relación directa con el poema, pero en ambas situaciones la sorpresa llega por la espalda. Esta ocurrencia es buena muestra de la actitud lúdica e intelectual, pero con base en la cultura clásica, que caracterizaba a Buson.
Para el poema de estilo haishi “Shunpū bateikyoku” (“Brisa de primavera en el embarcadero de Kema”), incluido en la colección Yahanraku (“Música de medianoche”, 1777), en el que recoge sus más personales nostalgias, coloca una ilustración que muestra a una jovencita que vuelve a su aldea desde su lugar de trabajo. Es una sucesión de 18 escritos que mezclan hokku, poemas chinos y prosa de estilo chino. Veamos tres de los poemas contenidos. El último de los tres es el que cierra la serie.
憐(あわれ)みとる蒲公(たんぽぽ)茎短(みじかう)して乳を浥(あませり)
Awaremi toru tanpopo kuki mijikō shite chichi wo amaseri
(El diente de león que de tan lindo arranqué leche supuraba de su corto tallo.)
むかしむかししきりにおもふ慈母の恩/慈母の懐袍(かいほう)別に春あり
Mukashi-mukashi shikiri ni omou jibo no on / jibo no kaihō betsu ni haru ari
(Se me agolpan lejanos recuerdos de mi amorosa madre, / de aquella otra primavera que anidaba entre sus brazos.)
君不見(きみみずや)古人太祇(たいぎ)が句/藪(やぶ)入りの寝るやひとりの親の側
Kimi mizu ya kojin Taigi ga ku / yabuiri no neru ya hitori no oya no soba
(No habrás leído quizás los versos del viejo Taigi: / cómo vuelve a casa la moza que trabaja en casa ajena y se acuesta junto a su madre.)
Los dos primeros están unidos por el parecido entre el jugo que emana del tallo cortado del diente de león y la leche materna. En el último, Buson evoca un poema de su ya fallecido amigo Taigi que le sirve para poner fin a la serie de una forma muy innovadora. Combinando distintas formas poéticas, va moldeando imágenes de paisajes exteriores e interiores que se suceden. Este tipo de ensayo experimental lo reservaba Buson para su pequeño grupo de colaboradores más íntimos. Y es que para Buson el haikai era ante todo una afición, un espacio en el que liberar su mente. Y también un consuelo y solaz para su corazón de atareado pintor del pueblo.
La vida de este gran poeta se extinguió poco antes de la madrugada del 25 de diciembre de 1783. Tenía 68 años. Cerró su existencia con estos versos:
しら梅に明(あく)る夜ばかりとなりにけり
(Y ahora sí, la mañana
se abre paso en la blancura
de los floridos ciruelos.)
Pese a la devoción que sentía por Bashō, Buson se apartó conscientemente del estilo simple, sin sutilezas, practicado por los herederos poéticos del gran maestro, y perseveró en una personalísima combinación de sentimiento poético e ingenio. Su tumba está en el templo de Konpukuji, en barrio de Higashiyama de Kioto. Fue en este templo, relacionado con la biografía de Bashō, donde Buson reconstruyó la “choza de retiro” Bashōan.
Fotografía del encabezado: Retrato de Yosa Buson. Imagen elaborada a partir del retrato guardado en la Colección Digital de la Biblioteca Nacional de la Dieta.
(Traducido al español del original en japonés.)