Tres lugares de la región de Tōhoku donde contemplar los cerezos en flor: Aomori, Iwate y Akita
Guíade Japón
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Los cerezos del monte Iwaki (Hirosaki, Aomori)
Período de plena floración: de finales de abril a principios de mayo
La hilera de cerezos que tiñe de rosa la falda del monte Iwaki (Hirosaki, prefectura de Aomori), bautizada “La mejor hilera de cerezos del mundo”, tiene una longitud de unos 20 kilómetros y debe su existencia a una iniciativa ciudadana cuyo objetivo era crear un camino de cerezos de la variedad ōyamazakura (Prunus sargentii) en la zona. Para ello, llegaron a plantar 6.500 ejemplares entre 1985 y 1995, aproximadamente. Este tipo de cerezos es muy común en los climas fríos y destaca por el tono vivo de sus flores.
Las vistas de esta hilera que se extiende a lo largo y a lo ancho de una gran superficie cambian en función del lugar donde nos situemos. Destacan particularmente los bonitos paisajes que conforman los cerezos con el monte Iwaki aún nevado al fondo, el reflejo del monte y los árboles en el agua y el monte bajo un arco de cerezos. Estas y otras muchas estampas nos esperan en la zona.
El período de plena floración suele abarcar de finales de abril a principios de mayo. No obstante, al tratarse de un camino en la falda del monte Iwaki, los árboles florecen en fechas distintas en función de la altitud. Por ello, recomendamos consultar el sitio web oficial (solo en japonés) de la Asociación de Turismo del monte Iwaki, en el que se publica información sobre cuándo y dónde se pueden ver las flores en todo su esplendor.
Los cerezos de la purificadora de Yonai (Morioka, Iwate)
Período de plena floración: de finales de abril a principios de mayo
La depuradora de Yonai, la más antigua de Morioka (prefectura de Iwate), es Propiedad Cultural Tangible de la nación. En 1934 se plantaron allí nueve cerezos de la variedad yaebeni shidarehiganzakura, un tipo de cerezo llorón, para conmemorar la finalización de los trabajos relacionados con el suministro de agua y el alcantarillado. Posteriormente, se añadieron más ejemplares, hasta llegar a los 32, y el lugar se convirtió en un enclave famoso de la ciudad donde contemplar los sakura.
Estos árboles se caracterizan por tener unas flores de color rosa oscuro que cuelgan elegantemente de las ramas y por su floración tardía, de ahí que las autoridades de Morioka les hayan otorgado un estatus especial de conservación. En la actualidad hay una cincuentena de árboles en el recinto de la depuradora, si contamos también los higanzakura convencionales. Cuando los sakura están en plena floración, el paisaje es de una belleza tal que se nos olvida que se trata de un lugar donde se purifica el agua.
La depuradora de Yonai, que atrae a unas 30.000 personas en la época de floración de los cerezos, sigue en funcionamiento, motivo por el cual el público general solo tiene permitida la entrada al recinto cuando los yaebeni shidarehiganzakura han florecido por completo. Para saber las fechas concretas, basta con consultar la página web de la propia depuradora o el portal de la Asociación de Turismo y Convenciones de Morioka. Recordemos que está prohibido comer y beber en todo el complejo; tampoco está permitido sentarse en el suelo, fumar ni llevar mascotas. Lo que sí podremos hacer es dar un paseo para contemplar los cerezos en todo su esplendor.
La carretera de los Cerezos y las Flores de Colza, (Ōgata, Akita)
Período de plena floración: de finales de abril a principios de mayo
La carretera de los Cerezos y las Flores de Colza se encuentra en la localidad de Ōgata (prefectura de Akita) y abarca unos 11 kilómetros a lo largo de la carretera prefectural número 298. Como su propio nombre indica, allí se puede disfrutar simultáneamente del florecimiento de los cerezos y las flores de colza; concretamente, de tres variedades distintas de sakura: somei-yoshino, de tonos claros; yaezakura, cuyos pétalos gruesos se superponen, y benizakura, de color rosa palo.
La época de plena floración de los cerca de 3.700 cerezos y las flores de colza repartidos por una superficie de 11,2 hectáreas es todo un espectáculo pomposo a la par que encantador. El contraste del rosa y el amarillo sobre el azul del cielo nos hace sentir la calidez de la primavera.
Por lo general, las flores de colza y los cerezos florecen entre finales de abril y principios de mayo, época en la que se celebra un festival especial: por los campos llenos de flores de colza circula un trenecito; además, en el área de servicio de Ōgata se pueden degustar especialidades típicas de Akita, como unas empanadillas (gyōza) elaboradas con una harina de arroz de producción local.
Texto: Shoe Press
(Traducción al español del original en japonés)